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Cuatro turistas, entre ellos estadounidenses, mueren por presunta intoxicación por metanol en Laos
En un trágico incidente en Vang Vieng, Laos, cuatro turistas murieron y varios más están gravemente enfermos debido a una sospecha de intoxicación por metanol debido a alcohol contaminado. Entre las víctimas se encuentran dos mujeres danesas, una mujer australiana llamada Bianca Jones y un ciudadano estadounidense. El incidente ocurrió cuando los turistas consumieron alcohol en un bar en el popular destino para mochileros de Vang Vieng.
Las víctimas australianas, Holly Bowles y Bianca Jones, de 19 años, de Melbourne, fueron hospitalizadas después de una noche de fiesta bebiendo el 12 de noviembre de 2024. Bianca Jones falleció debido a una inflamación cerebral causada por altos niveles de metanol en su sistema, mientras que Holly Bowles permanece con soporte vital en el Hospital de Bangkok en Tailandia.
El Departamento de Estado de Estados Unidos confirmó la muerte de un ciudadano estadounidense pero no proporcionó más detalles. Las autoridades danesas también informaron de la muerte de dos mujeres danesas de unos 20 años, aunque no revelaron información adicional por motivos de confidencialidad.
El incidente ha generado importantes preocupaciones sobre las normas de seguridad y su aplicación en los centros turísticos. El metanol, una sustancia tóxica, a veces se agrega al alcohol como una alternativa más barata al etanol en países con leyes débiles sobre bebidas alcohólicas. Esta práctica puede provocar una intoxicación grave o la muerte.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, se dirigió al parlamento australiano, expresando su más sentido pésame y destacando la necesidad de concienciar sobre los riesgos asociados al consumo de alcohol en determinadas regiones. «Éste es el peor temor de todo padre y una pesadilla que nadie debería tener que soportar», afirmó.
En respuesta al incidente, varios países han actualizado sus advertencias de viaje para Laos. Australia y Nueva Zelanda han advertido a los viajeros que estén alerta a los riesgos potenciales, particularmente con bebidas espirituosas y cócteles, que pueden estar adulterados con sustancias nocivas.
El albergue implicado, Nana Hostel, desactivó su presencia online y dejó de aceptar reservas. El propietario del albergue negó haber añadido metanol a las bebidas y afirmó que la policía local había controlado el alcohol del albergue y a sus proveedores.
