PETA denuncia abuso animal severo en la planta de Butterball Turkey antes del Día de Acción de Gracias

Una investigación reciente de Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA) ha descubierto inquietantes acusaciones de abuso animal en una planta de pavos de Butterball. La investigación, que incluyó un vídeo encubierto publicado en Instagram, detalla impactantes actos de crueldad contra los pavos en las instalaciones.

El investigador de PETA, que permanece en el anonimato, afirma haber visto a trabajadores agredir sexualmente a pavos antes de ser sacrificados. El video muestra a los trabajadores supuestamente follando con pavos encadenados e insertando los dedos en las cloacas de las aves. Imágenes adicionales muestran a los trabajadores manipulando y pateando bruscamente a los pavos.

Esta no es la primera vez que Butterball se enfrenta a este tipo de acusaciones. En 2017, PETA acusó a los trabajadores de un matadero de Butterball en Ozark, Arkansas, de abusos similares, como patear y arrojar pavos, así como insertar sus dedos en pavos hembras.

El investigador espera que el nuevo vídeo genere conciencia sobre las duras realidades de las granjas industriales y anime a los consumidores a reconsiderar su consumo de pavo, especialmente ahora que se acerca el Día de Acción de Gracias. Los esfuerzos de PETA tienen como objetivo inspirar un cambio hacia prácticas más éticas en la industria alimentaria.

Butterball, una marca reconocida operada por Butterball LLC, produce más de mil millones de libras de pavo al año y es un actor importante en los mercados nacionales e internacionales. La empresa ha sido un elemento básico en la industria alimentaria desde 1940, aunque Butterball LLC se formó oficialmente en 2006.